Aquí estamos, en este barco llamado España, navegamos con lentitud, con pereza, el armazón del buque se duele en cada embate con las olas, el cielo se cubre de nubes, y el miedo a la realidad presente y a la certidumbre sobre un futuro exigente, se percibe en la mirada sincera de los marineros.
Desde cubierte el capitan nos intenta transmitir confianza, ya lo hizo anteriormente, cuando la primera tormenta nos envolvio, y nos dijo nos os preocupeis pasara rapido, nuestro barco es el más resistente de la flota, sin embargo las negras nubes continuan un día mas a nuestro alrededor, y comienza a faltar confianza en la capacidad y sinceridad, de nuestro capitan.
Este, nuestro barco,navega sin un rumbo claro, unas veces parece que queremos ir al norte, otras veces nuestro destino se situa en el sur, se filtra una sensación de querer ganar tiempo, sin un rumbo claro, a la espera de que algún barco de la flota, el USA, o el Alemania, o quizas el China, nos ayuden a coger velocidad y a definir nuestra dirección de proa.
Unos pocos, avezados marineros, con critero propio, que han servido en diferentes buques y conocen de cerca el estado de nuestro barco, mantienen una actitud de tristeza, cinismo, y hastio, saben que la sentina filtra cada vez más agua, conocen de cerca la resistencia de los materiales de la estructura del barco y asumen que resistira algún tiempo más, pero no mucho.
Estos marineros saben, que hace algún tiempo algunos pasajeros afortunados comenzaron a planear su salida disimulada en busca de una embarcación más solida y resistente, sin embargo el grueso del pasaje continua en sus camarotes, con la tranquilidad que solo la ignorancia puede ofrecer.
¿Que hacer? Se preguntan estos marineros avezados, hablar con el capitan parece tarea imposible, los pasajeros no escuchan o no entienden, y las negras nubes serán dentro de poco irreconocibles en un cielo negro, oscuro, y terminal.
Hace un año, un paquebote, el Islandia naufrago estrepitosamente, los buques de socorro FMI y UE acudierón en su ayuda, haciendo pagar a los pasajeros por el naufragio, en las próximas tres semanas el buque Letonia parece apunto de hundirse y arrastrar consigo a su pasaje, el Irlanda se haya con los motores parados, y el nuestro reduce velocidad a cada dia que pasa.
Parece que deberemos buscar pasaje en otro barco, el reloj marca cada vez más cerca el desenlace, la musica continua sonando, no podemos perder más tiempo, la fiesta pronto acabara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario